Los textos y las fotografías son creaciones surgidas por casualidad de mi cabeza :)

lunes, 9 de noviembre de 2009

Las sábanas huelen a amor


Es como un juego, ¿te acuerdas cuándo éramos pequeños? Todo era un simple juego, los problemas eran ficticios que cuando terminábamos de jugar desaparecían con el viento, y nuestra máxima preocupación era elegir a que debíamos jugar y convencer a mamá que te dejara jugar un rato más con tus amigos.
- Ese juego ya terminó hace años. ¡Espabila! ¡Reacciona! Tú te has empeñado en no crecer, y así has hecho, tu lo has conseguido. Pero te molesta que los demás hayan crecido y no se queden contigo, a tu lado, jugante a este complicado juego de la vida.
Eso era lo típico que te soltaba tu madre, ahora, ya se ha cansado de repetírtelo y digamos que no hay una muy buena relación entre tu y ella. Siempre te has querido salir con la tuya, y así es, siempre lo consigues.
Ahora yo también he decidido jugar al juego de mi vida. No voy a privarme de nada y lo he intentado miles de veces pero sola no puedo. No dejo de ver mis problemas diarios, no puedo volver a ser una niña, yo sola no. Por eso estoy aquí. No me mires así, me haces sentir mal... Creo que puedo permitirme pedirte esto. Se que no te he dado un gran discurso, pero no puedo seguir así, te necesito a mi lado, y siento que te voy perdiendo y no quiero.
¡Quiero ser una niña junto a ti! Ser niños y hacer cosas de mayores, como cuando jugábamos. Hacerlo cada día, como si fuera siempre la primera vez, y llegar juntos al orgasmo, y levantarnos cada mañana juntos, abrazados, entre sábanas que olerán a amor, cómplices de nuestros deseos.
Ahora dime tú, ¿quieres?

No hay comentarios:

Publicar un comentario